EL BAMBÚ, consejos para plantarlo y disfrutarlo
Forma elegantes bosquetes, es fácil de cuidar y... bastante invasivo
El bambú es una planta evocadora y resistente, una todoterreno allí donde la pongas. Sólo va a pedirte que no dejes de darle humedad. Y tendrás que vigilarlo, porque lo quiere ocupar todo. Antes o después le pondrás un límite físico.
Unos consejos de plantación, mantenimiento y poda te ayudarán a tener un bambú precioso, escojas el la variedad y el lugar que escojas.
Qué variedad de bambú plantar
Todos los bambúes comparten las mismas características principales. Son rudos, aguantan casi todo y si no les pones límites. Para ver muchos tipos de bambú de una ojeada, puedes ver la colección de bambúes del Jardín Botánico de Madrid.
Cómo plantar el bambú
Nuestra caña elegante se planta mejor en otoño y en primavera, siempre que se riegue regularmente al principio. Evita los periodos de heladas o altas temperaturas para esos meses de la plantación.
Ten en cuenta también que al bambú le gustan los rincones soleados. Y en cuestión de suelos, nunca mejor dicho, es un todoterreno. Sólo evita que pase sed.
Crecimiento del bambú
Los bambúes crecen rápido y son muy resistentes a la sequía y las heladas. Al principio el crecimiento es lento, pero cuando los rizomas arraigan todo se acelera. Te encontrarás con un bosquete de cuatro metros de alto en cinco años.
Si te interesa acelerar ese crecimiento, ponle abono para césped. Y si prefieres una variedad que no suba mucho, escoge el Pleioblastus.
Poner barrera al bambú invasor
Para evitar el bambú invasor, es necesario instalar una barrera antirrizomas. La barrera antirrizomas debe descender hasta una profundidad de 70 cm y llegar hasta 5 cm por encima de la superficie del suelo.
Bambú en maceta
La regla de oro para plantar bambú en una maceta es poder regarlo en cuanto veas que la tierra está seca en la superficie. El tamaño de la maceta debe ser suficiente para que el bambú crezca.
Asegúrate de que la maceta tenga un agujero en el fondo para el drenaje del agua. Y riégalo con frecuencia.
Mantener tu bambú
El bambú es una planta fácil de cuidar, siempre que se tenga buen cuidado al plantarla con una barrera antiraíces que le diga hasta dónde puede extenderse. Una vez instalado, requiere pocos cuidados y puede podarse a voluntad.
El riego
El bambú es una planta que requiere mucha agua, sobre todo en macetas. Es importante no dejar que la tierra se seque demasiado tiempo entre riego y riego.
Abono para el bambú
Para mantener tus plantas la fertilización es importante, sobre todo cuando se trata de tenerlos en maceta.
El mejor abono para el bambú debe ser rico en nitrógeno. Debe elegir un abono específico o simplemente un abono para césped está bien.
Ponle abono específico a principios de primavera, y repite la aplicación al cabo de 5-6 semanas si es necesario.
Poda bien las cañas
Puedes podar el bambú a la altura que más te guste. Es una planta que sale adelante le hagas lo que le hagas. Eso no impedirá que esté sano e incluso se hará más denso.
Y si tienes prisa por que crezca, elige una variedad de Phyllostachys como Phyllostachys nigra o Phyllostachys aurea.
Uno de las variedades más comunes en el sur de Europa es la Pseudosasa japonica, también conocida como Bambú Métaké. Da hojas grandes y llega a crecer hasta 4 ó 5 m de altura. Eso sí, pierde grosor en la base con el paso de los años. Mientras la mayoría la engorda, como es lo habitual en cualquier planta leñosa.
¿Amarillean tus cañas?
El bambú es duro ante las enfermedades, pero a menudo las hojas amarillean. Casi siempre es falta de riego. Recuerda que esta planta procede del sudeste asiático, de los entornos más húmedos del planeta.
Pero también puede ser que amarillee por lo contrario, un exceso de agua, debes poner atención a esto. Si sabes que éste segundo es el motivo, espera a que la tierra se seque por completo antes del siguiente remojón.
El bambú también puede ser presa de insectos y parásitos, sobre todo si se cultiva en invernadero o en interiores.
Algunas plagas a tener en cuenta
Para resolver las plagas, en función de donde tengas plantados tus bambúes, intenta siempre combatirlas con depredadores naturales o al menos con soluciones tradicionales contra las plagas que no incluyen el uso de insecticidas.
Pulgón. Suelen ser inofensivos para la planta.
Cochinilla. Las hojas se vuelven blanquecinas, amarillean y se caen.
Araña roja. Chupa la savia, y las hojas se vuelvan amarillas.
Edición BE OnLoop sobre información de Jardinier Malin
