EL HONDO, el parque natural del Vinalopó
Las lagunas actuales fueron en tiempos la Albufera de Elche
El Parque Natural de El Hondo es lo que hoy nos queda de la antigua Albufera de Elche, que fue casi completamente desecada desde el siglo XVIII. Hoy puedes ver en este lugar 172 especies de aves, cincuenta de ellas nidificantes. Recorre las lagunas por pasarelas de madera y observa flamencos y anátidas desde casetas con tus prismáticos.
El Hondo fue declarado Parque Natural por la Generalitat Valenciana en 1994. Ocupa 2.387 hectáreas en dos lagunas que desde hace un siglo se usan para el riego de la comarca del Baix Vinalopó.
Pasarelas sobre el agua y observatorios de aves
Es una excursión perfecta para una mañana completa. Está muy bien adaptado para la visita, con pasarelas de madera sobre el agua en las que circular con silla de ruedas o si llevamos a niños pequeños en silla de paseo.
En 1918, cuando la Ley Cambó combatió el paludismo eliminando todas las zonas húmedas que generaban mosquitos, El Hondo se salvó al ser convertido en dos embalses para el riego de la comarca.
Además, unas casetas en madera -que llamamos hides, escondites en inglés- nos permiten observar la fauna con prismáticos o telescopio sin asustarla. Y también hay visitas guiadas, de las que te informa aquí VisitElche.
172 especies de pájaros, y barcas para verlas
En total en el parque hay censadas 172 especies de aves. Es por esa importancia del enclave que El Hondo forma parte de la lista RAMSAR de zonas húmedas destacadas del mundo y también ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves). Una estrella de esa lista es la malvasía cabeciblanca -se llegó a contear 500-. Y otra es la cerceta pardilla -apenas veinte, una especie en gran peligro de extinción en la Península Ibérica-.
La visita también puede incluir un paseo en barcas de fondo plano, sin quilla, como las que se hicieron populares en la Albufera de Valencia. Antes las manejaban barqueros que avanza empujando con una percha, un palo largo con punta acabada en V. La clavaban en el suelo de la laguna para impulsar la barca.
El Centro de Interpretación
Antes del inicio de la excursión te recomendamos que pases a ver la introducción informativa que te ofrecen el Centro de Interpretación y el Museo del Parque Natural de El Hondo. Porque así disfrutarás más el recorrido por el paraje.
La visita es importante para comprender cuál es el valor ambiental de estos espacios de humedales, que son refugio para una gran variedad de aves. Unas son residentes habituales de todo el año y otras que usan este lugar como descansadero en su viaje migratorio de primavera y otoño hacia zonas más cálidas en el norte y centro de África o más frescas en el norte de Europa.
Fue cazadero real
El Hondo fue uno de los cazaderos reales más populares en los siglos XVI a XVIII. Y hace unos años se llevó a cabo una operación compleja de limpieza del suelo de las lagunas, porque acumulaban toneladas de perdigones de plomo de tantas décadas de caza con escopeta.
Para ello se desecaron una y otra charcas, y desde entonces las aves viven sin el peligro que suponía la presencia de plomo en el agua. Porque el plomo acaba entrando en la cadena alimentaria, por ejemplo en el caso de los flamencos, que pican el fondo de la laguna y comen de ese fondo, en el que se acumulaban los perdigones. De hecho, en 2020 cientos de parejas de flamencos criaron en El Hondo, tras doce años de ausencia.
Anímate a hacer esta visita sorprendente. Y no te olvides de traer unos prismáticos decentes, porque los aprovecharás bien.
Y si te interesan otros rincones naturales y rutas de la Comunidad Valenciana no dejes de consultar el blog de Valencia Bonita.
Lluís Alamany
