GUACAMOLE CASERO: una receta sencilla que nunca falla
La receta que hará que todos tus amigos quieran venir a tu casa
Con esta receta sencilla y deliciosa de guacamole casero vas a conquistar hasta los paladares más exigentes ¡Qué cosa más rica! Este plato se ha convertido en un imprescindible de la gastronomía mexicana por ser una mezcla deliciosa de aguacate, cebolla, tomate y limón, ideal tanto para acompañar platos principales o como para aperitivo.
¡Hola, amigos! Hoy os traigo una receta fresquita y deliciosa que seguro os va a encantar. Se trata de un guacamole casero, una receta súper fácil y rápida de hacer con el aguacate como ingrediente estrella, y que podéis encontrar en cualquier mercado o supermercado en España. ¡Vamos allá!
Guacamole casero: una receta sencilla y muy rica
Ingredientes:
- 4 aguacates maduros (pero no demasiado blandos)
- 2 tomates rojos y jugosos
- Media cebolleta o cebolla blanca fresca
- Un manojo de cilantro fresco
- 1 lima (o un limón si no encuentras lima)
- Jalapeños (al gusto)
- Unas gotas de salsa Tabasco (opcional)
- Sal
- Pimienta
Paso a paso para preparar el mejor guacamole casero, delicioso y sencillo:
1. Prepara los ingredientes
- Tomates: Primero, vamos a pelar los tomates. Yo prefiero quitarles la piel porque me parece más agradable al comer, aunque si ves que te cuesta, puedes dejársela. Con un pela patatas, quítales la piel con cuidado y después pícalos en trocitos pequeños. ¡Qué cosa más rica! Me encanta cuando quedan bien jugosos, pero no desechos.
- Cebolleta/Cebolla: Ahora toca la cebolleta. La cortamos por la mitad y picamos muy finamente una de las mitades. La otra mitad puedes guardarla para otra receta. La cebolleta le da un toque muy fresco y sabroso a nuestro guacamole.
- Cilantro: Si te encanta el cilantro, como a mí, no te cortes y añade un buen manojo. Es un ingrediente que encuentras fácilmente en cualquier supermercado. Lo picamos bien finito para que se mezcle mejor en nuestro guacamole. Hay gente que lo ama y gente que no puede con él, pero yo soy del primer grupo, ¡amor puro por el cilantro!
2. Prepara los aguacates
Es importante dejar los aguacates para el final para que no se oxiden. Corta los aguacates por la mitad, quita el hueso y saca la carne con una cuchara. Pon la carne en un cuenco grande y córtala en trocitos antes de empezar a machacar. Con un tenedor, machaca los aguacates dejando algunos trocitos. No los machaques demasiado, queremos algunos trocitos para que no quede como un puré.
3. Mézclalo todo
Añade el zumo de la lima al aguacate machacado. Esto no solo evita que se oxide, sino que también le da un toque cítrico delicioso. Me encanta el sabor de la lima, es más perfumada que el limón. Luego, incorpora el tomate, la cebolleta y el cilantro picados. Mezcla todo con suavidad para no romper demasiado los ingredientes. ¡Esta receta sencilla de guacamole casero está casi lista!
4. Toque picante y sazonador
Jalapeños y Tabasco: Si te gusta el picante, añade jalapeños picaditos y unas gotitas de Tabasco. A mí no me gustaba el picante antes, pero cada vez más me he aficionado y ahora me encanta. En los supermercados podéis encontrar latitas de jalapeños ya troceados. Prueba un poco antes de añadir mucho, porque algunas latas pican más que otras. Si no eres fan del picante, puedes omitir este paso. Yo pongo Tabasco porque le da un toquecito interesante, pero solo unas gotitas.
Sal y Pimienta: Añade sal al gusto y un poquito de pimienta. Remueve bien para que todos los sabores se integren perfectamente. La clave está en probar y ajustar a tu gusto. Siempre hay que probar mientras cocinas para asegurarte de que todo quede perfecto.
5. Presentación del guacamole
Sirve tu guacamole en un bol bonito y colócalo en el centro de un plato grande. Alrededor, pon nachos de maíz para que todos puedan disfrutar de este delicioso guacamole casero con un crujiente perfecto, una receta sencilla y rápida muy nutritiva y saludable. Esta presentación es ideal para una barbacoa, un aperitivo o cualquier reunión con amigos. ¡Queda espectacular!
Tips sostenible: ¡composta tus restos!
En otro artículo ya te hablamos de los beneficios del aguacate para tu salud, y de cómo usar el hueso del aguacate como pesticida natural, pero además de ser sencilla esta receta de guacamole casero, es ideal para obtener restos de pieles y vegetales para compostar. La piel del tomate, los huesos y pieles de los aguacates, y las cáscaras de la cebolla pueden ser un excelente material para tu compost.
Compostar estos restos no solo reduce la cantidad de residuos que generamos, sino que también crea un abono natural riquísimo para nuestro huerto. Yo lo hago siempre y mis plantas lo agradecen con creces, produciendo hortalizas y hierbas más saludables y sabrosas. Sin embargo, ten en cuenta que los restos de cítricos, como las cáscaras de la lima o el limón, no son adecuados para el compost. Los cítricos pueden alterar el pH de tu compostera, haciéndola demasiado ácida y dificultando la descomposición de otros
materiales.
Además, sus aceites esenciales pueden ser perjudiciales para algunos microorganismos beneficiosos que facilitan el proceso de compostaje. Por lo tanto, mientras que los restos de tomate, aguacate y cebolla de esta receta son perfectos para compostar, evita añadir los cítricos y obtendrás un compost equilibrado y nutritivo para tu huerto. ¡Así que ya sabes, a compostar se ha dicho!
Tips para ser mejor cocinero: educa tu paladar
Uno de los secretos para ser un gran cocinero es aprender a educar tu paladar. La cocina es un arte que se perfecciona probando constantemente durante toda la preparación. No basta con seguir una receta al pie de la letra; es esencial ir probando y ajustando los sabores a tu gusto personal. Este proceso de prueba y error te permite corregir y afinar cada plato hasta lograr el equilibrio perfecto.
Además, no subestimes el valor de la experiencia gastronómica fuera de tu cocina. Ir a comer a restaurantes, a casa de amigos o incluso viajar y probar comidas locales te brinda la oportunidad de descubrir nuevos sabores y técnicas. Estas experiencias enriquecen tu conocimiento culinario y te ayudan a desarrollar un paladar más sofisticado y sensible.
Recuerda que aquellos que aman cocinar, generalmente aman comer. Así que, disfruta del proceso, sé curioso y abierto a nuevos sabores. Esta dedicación y pasión por la comida es lo que te convertirá en un mejor cocinero.
¡Buen provecho y hasta la próxima, amigos!
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Articulo escrito por Zoe Pavillon para BEonloop
