MANTENER TU ESTANQUE vivo y sano
El estanque necesita ser un ecosistema completo y equilibrado
Un estanque es un ecosistema completo, con un ejército de elementos que hay que vigilar para el equilibrio de un agua sana. El biotopo es tu estanque físico, y la biocenosis es la comunidad vegetal y animal que vive en él. A lo largo de todo el año, mantener tu estanque en buena forma no es fácil. Te damos unas pistas para lograrlo.
La calidad del agua de tu estanque es la base para la vida de quienes viven en él. Los estanques suelen recuperar agua evaporada gracias a la lluvia. Pero el agua de lluvia no es neutra, su pH es ácido, habitualmente de 5 pero puede subir -bajar- a 4 o 3.
Esto ocurre porque se carga de minerales cuando atraviesa las capas atmosféricas. Y si llega al estanque procedente de escorrentía, su acidez y otros elementos de su composición van a variar en función del terreno por el que va pasando.
La química de tu agua
Hay componentes químicos que tienen consecuencias para el equilibrio del estanque. Cuando en el agua son excesivos los nitratos estamos dando de comer a las algas verdes filamentosas, las spirogiras.
El agua necesita tener más aporte de oxígeno porque de otra manera seres vivos como los peces, morirán asfixiados. El Hidrógeno controla el pH, Calcio y Magnesio están en la condición dura o blanda del agua, y luego están el CO2 y el Nitrógeno en esa fórmula del agua viva.
Organismos vivos
El conjunto de seres vivos que viven en equilibrio dentro del ecosistema -biocenosis- pertenecen a 3 categorías:
LAS BACTERIAS DEL ESTANQUE. Debes sembrar el estanque con bacterias para tener bacterias buenas.
LAS PLANTAS -algas, plantas de cierto tamaño, musgos- que utilizan la energía solar para producir materia orgánica, que es el primer eslabón de la cadena alimentaria. Y que también cumplen un papel importante en la oxigenación del agua, siempre que el follaje esté sumergido, como la milenrama.
LOS ANIMALES. Sean pequeños o grandes consumen materia orgánica viva (peces, insectos, crustáceos, moluscos que se comen entre sí). Así regulan la biomasa vegetal y las poblaciones de peces y otros animales se controlan entre ellas si el hábitat está sano.
Un grupo que podemos añadir es el de los descomponedores (hongos, bacterias, también insectos y crustáceos que se alimentan de materia orgánica muerta y la transforman en partículas menudas.
Las bacterias son el último eslabón de la cadena trófica, acaban siendo materia mineral que las plantas absorben.
Los descomponedores acaban viviendo en el fondo del estanque -zona bentoica-, son puro limo. A veces tenemos la manía de frotar el fondo y limpiar ese limo. Pero es un error hacerlo, salvo que tengamos un dedo de espesor acumulado, que en ese caso es un indicador de desequilibrio del sistema y hay que hacer algo.
El ciclo del nitrógeno
Si el nitrógeno orgánico (las proteínas, aminoácidos y otros) se transforma en nitrógeno mineral, entendemos que nuestro estanque está sano. Si el agua huele mal no hay duda: es el estanque ha caído en la eutrofización, hay demasiados nutrientes y poco oxígeno. El ciclo de la visa sana no es posible en ese caso. Las algas se zampan el oxígeno.
Consulta entonces en tu centro de jardinería para saber cómo manejar con equilibrio bacteria aerobias y anaerobias -las que viven con y sin oxígeno-. Cuando crees tu estanque es importante que inocules bacterias buenas, que regenerarán más bacterias buenas.
Una red antihojas en tu estanque
Pasa el verano y comienzan a caer hojas al agua. Esto aumenta la proporción de materia orgánica en el agua, y debes controlarlo utilizando una red para sacarlas a tierra. Un exceso de nitratos complica el equilibrio del agua y condena a la vida animal. Y debes tener en cuenta que el número de peces no debe ser excesivo, porque sus excrementos también son una fuente de nitratos que envenenará el agua y acabará con ellos. Consulta, en función de tamaño y volumen métrico de tu estanque, en un centro de jardinería.
Oxigenar el agua
La oxigenación del agua es necesaria para que todo el ciclo vital del estanque funcione. ciclo. Para ello debes poner más plantas de agua oxigenadoras, mejorar la llegada de luz solar a la lámina de agua -clarea los árboles y setos circundantes- y pon un pequeño surtidor de agua, que burbujee en la caída.
Edición BE OnLoop con información de Eva Deuffic
