MUSEOS SUBMARINOS de Jason DeCaires Taylor
Alto exponente del Art Land, tiene performances en medio mundo
Desde 2007 avanza por el mundo un nuevo género de museos, ideados por el artista británico Jason DeCaires Taylor. Formados por esculturas contemporáneas y monumentales ocupan entornos submarinos a los que sólo pueden acceder los visitantes que se sumergen en ellos.
Estas auténticas performances permanentes atraen a millones de personas. Y el autor respeta al ecosistema marino, sin proteger la superficie de su obra ante el avance de algas y corales, que ya van formando parte del conjunto.
Grecia hizo accesible a los turistas en 2022 el pecio de un barco mercante del siglo V a.C., pero el concepto de hacer de un entorno submarino un museo no es nueva. Un banquero que esconde la cabeza bajo la arena, un Volkswagen que cede el paso a un bando de doradas o un obeso espectador de televisión comiendo patatas fritas en su sofá son piezas de los universos submarinos de DeCaires Taylor.
Este universo en el silencio del agua está lleno de referencias al mundo humano de cada día. Y tiene esculturas de corte clásico o auténticas viñetas que interpretan con humor escenas de nuestro tiempo. Tampoco es ajeno a la tragedia incesante de naufragios de emigrantes de costas del sur a costas del norte.
Desde que se graduó, DeCaires Taylor ha sido muchas cosas que han desembocado en esta especialidad que le ha hecho un hueco en la historia del arte. Diseñó escenografía para películas, fue tallador de piedra, pero también fotógrafo y profesor de buceo. Vamos, que su actual ocupación es la fórmula final de la combinación de todas sus aptitudes. Y siempre mostrando veneración por la naturaleza.
Museos submarinos, ejemplo de Land Art
Ubicadas en un entorno natural, estas creaciones se inscriben en el más puro land art. Y nos invita a romper con la necesidad de encontrarnos con el arte en las galerías o las ferias de arte como espacio obligado para la exposición digna de las obras.
Esa dignidad cobra una nueva perspectiva cuando vemos sus esculturas colonizadas por las algas o invadidas por el coral que empieza a desdibujar sus formas. Es un arte que se somete al imperio de la ley de la naturaleza.
DeCaires asume el ciclo vital de los organismos acuáticos, y para ello su obra está hecha con cemento de pH neutro. Eso significa que Taylor no se preocupa sólo de la estética de sus obras, sino también de su funcionalidad, y asume el paso del tiempo biológico sobre sus obras. Habrá algas y corales, serán parte del paisaje natural.
Reflexión ante el cambio climático
El autor, de hecho, reconoce que el conjunto de su obra es una crítica de la sociedad contemporánea. Hay mucho guiño al cambio climático y a los efectos causados por los humanos en la ecosfera. Y para no caer en el pesimismo, el autor confiesa equilibrar esos sentimientos negativos con estas escenas de interpretación positiva de nuestra realidad.
Cuando le preguntan por ese desvanecimiento de algunas obras de sus museos submarinos ante el avance de la naturaleza en sus superficies, él defiende que su trabajo pretende dar forma a la reflexión sobre la relación entre los mundos humanos modernos y el mundo natural, sobre la inevitable levedad del ser porque estamos sujetos cambio permanente.
Así que también debemos pensar sobre cierta belleza de la mortalidad y un lado positivo de la decadencia, defiende Jason deCaires. Y para demostrar esa voluntad vemos cómo las naturalezas muertas son argumento habitual en su obra.
Performances por medio mundo
Y varios países han creado zonas protegidas para facilitar la visita de sus museos submarinos. El primero se abrió en 2006 frente a la isla de Granada, en las Antillas, y luego fue Cancún, en 2010, o en Lanzarote más tarde, en 2017.
Algunas de estas performances se pueden admirar buceando con aletas a entre 3 y 5 metros de profundidad. Y otras, más profundas, están reservadas a los submarinistas con botellas, que tienen el privilegio de poder nadar entre las esculturas, acompañados de peces y de la flora marina.
Descubre su obra en su sitio web oficial. Y en el de sus museos.
Redacción BE OnLoop