CAMINANDO FRANCIA para concienciar

Rémi Tiberghien cuida senderos GR e informa de la crisis ambiental

Rémi Tiberghien salió del Monte Saint-Michel, en Bretaña, el 1 de enero de 2020, para hacer su personal Tour de Francia… En total, ha recorrido 7.300 km haciendo el perímetro del país en 431 días -más los que le han retenido los confinamientos por la pandemia-, cargado con su mochila de 20 kg: una tienda de campaña, un saco de dormir y alimentos liofilizados.

Rémi es miembro de la Federación Francesa de Senderismo. Y hace una observación meticulosa de los senderos GR, que marca regularmente. Son los famosos senderos que todo el mundo conoce, identificables por sus marcas rojas y blancas, y es que Rémi ve cómo se deteriora la situación a simple vista, entre el cambio climático y el comportamiento humano. Incluso en zonas donde los pasos son difíciles y que sólo frecuentan los deportistas, encuentra basura.

La Semilla Verde, desde 2016

En 2016 creó la asociación La Semelle Verte (La Semilla Verde) con el objetivo de promover el senderismo y trabajar por la preservación del medio ambiente.

Rémi Tiberghien fue reuniéndose con alcaldes, empresarios y centros educativos, con quienes compartió información de lugares de sus zonas sufriendo impacto ambiental

Afiliada a la Federación Francesa de Senderismo, La Semelle Verte reúne a profesionales de la montaña y a meros aficionados que comparten un espíritu de aventura y de exploración, cerca de la naturaleza y en un ambiente de amistad.

Cada tres meses tiene que cambiar el recorrido de los GRS de los que se ocupa, a causa de la erosión, los desprendimientos por fuertes lluvias…

«A través de nuestros eventos, tratamos de sensibilizar al público sobre el desarrollo sostenible y la ecología, al tiempo que promovemos el senderismo mediante el mantenimiento de las rutas de senderismo, que se deterioran», afirma Rémi.

Y el 1 de enero de 2020 decidió hacer un gesto mayor, embarcándose en esta aventura de superación personal pero sobre todo de divulgación.

Amigos por el camino

De hecho pasó pocas noches en su tienda de campaña, porque la gente le invitaba a cenar y dormir en sus casas, porque de eso se trata su trabajo desde hace años: de compartir sus conocimientos y preocupaciones sobre el medio ambiente con el mayor número de personas posible, y de darles las herramientas para que entiendan que cada ciudadano puede actuar o reaccionar.

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Sobre la comida liofilizada, Rémi Tiberghien no bargaba bastante para todo el viaje, por lo que se organizó para abastecerse dos o tres veces al mes y recogiendo paquetes en oficinas de correos. Es fundamental cuando tiene tramos largos de alta montaña, en los que encuentra poco más que agua, especialmente en invierno.

Rémi pone el acento en que las consecuencias del cambio climático son evidentes también en los senderos GR históricos, esos GRS de los que se ocupa en el departamento de Seine-et-Marne.

«Sobre el terreno, soy testigo de los efectos del cambio climático en la fauna y la flora, pero también de las acciones humanas que transforman el paisaje y producen contaminación y residuos. También presentaré modelos alternativos y adaptaciones de acuerdo con las perspectivas del desarrollo sostenible», comenta.

Charlas con empresas en la ruta

Para concienciar y actuar dentro de sus posibilidades, decidió embarcarse en este viaje a pie por Francia, caminando de 5 a 6 horas, seis días a la semana. Un reto no es sólo físico y personal, ya que a su paso por pueblos y ciudades se reunió con todas las empresas y asociaciones que quieren implicarse por el planeta, y para ello lanzó la página web Ecotrek2020, en la que puedes encontrar todos los mapas de las rutas y las etapas de su periplo. Muchos se unieron a él para caminar un tramo.

Redacción BE OnLoop

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