
SITGES RECICLART 2025: arte reciclado y compromiso con el mar
La octava edición del festival convierte a Sitges en un laboratorio creativo para transformar residuos en conciencia colectiva
El arte puede cambiar nuestra mirada, pero también nuestros hábitos. Sitges ReciclArt 2025 lo demuestró con una edición que conviertió residuos en belleza, participación y acción colectiva. Del 2 de agosto al 21 de septiembre, más de 60 obras creadas con materiales reciclados ocuparon el Centre Cultural Miramar y distintos espacios públicos de Sitges. El festival no fue solo una exposición artística ya que se vivió como una experiencia inmersiva, gratuita y abierta a todos los públicos.
¿Qué hizo especial esta edición?
La octava edición del festival apostó por un nuevo modelo bienal, más profundo y participativo. Comisariada por Tanja Grass, fundadora de Drap-Art, la muestra central reunió obras que abordaban la crisis climática, la contaminación marina y la necesidad de repensar nuestro consumo.
Además de la exposición, hubo talleres, charlas, walking tours y performances que llevaron el arte reciclado a hoteles, galerías y calles de la ciudad. Sitges ReciclArt 2025 se consolidó como un referente en arte sostenible, conectando creatividad con conciencia ambiental.

Artistas clave en Sitges ReciclArt 2025
El festival reunió a 33 artistas de Europa, África y América Latina, cuyas obras transformaron residuos en narrativas visuales poderosas.
Destacaron el colectivo Ocean Sole (Kenia), con esculturas hechas de chanclas marinas; Onyis Martin, que exploró el reciclaje informal en Nairobi; y Patrick Tagoe-Turkson, con piezas creadas a partir de calzado y textiles africanos. Desde Cataluña, Neoplancton denunció el impacto de los microplásticos con un enfoque poético y crítico.

También participaron colectivos como la Fundació Ave Maria, con una instalación elaborada junto a personas con diversidad funcional, y proyectos nacidos de talleres ciudadanos con residuos recogidos en las playas de Sitges.
¿Cómo se vivió el festival en la ciudad?
Sitges ReciclArt 2025 traspasó las salas de exposición para conectar con vecinos, turistas y colectivos sociales. Actividades como las rutas artísticas, talleres familiares y performances en vivo crearon un ambiente participativo e inclusivo.
La inauguración, a cargo de la bailarina local Sílvia Cuesta, fue un ejemplo de esa fusión entre arte, reciclaje y emoción. Vestida con materiales reutilizados, simbolizó el peso invisible de nuestros residuos y la necesidad de transformar hábitos desde la cultura.
“El objetivo de la edición de este año es llenar Sitges de propuestas creativas que hagan reflexionar sobre la crisis climática, el derroche de recursos y la contaminación de los mares por microplásticos y, también, dar un impulso al cambio de hábitos…” — Tanja Grass, comisaria del festival
Donde otros ven basura, Sitges ve futuro
El festival tuvo un impacto real y medible. La recogida de materiales en playas, convertidos luego en arte, ofreció a muchas personas su primera experiencia directa de limpieza ambiental.
La ruta artística por comercios y hoteles integró el arte reciclado en el día a día urbano, generando nuevas sinergias entre cultura, sostenibilidad y turismo. Todo ello con un enfoque 100 % gratuito, inclusivo y accesible.

Sitges ReciclArt 2025 demostró que el arte no solo decora: activa. Cada obra, cada taller y cada conversación fueron una oportunidad para despertar conciencia. Porque todos podemos transformar residuos en belleza y ser parte del cambio.
Sigue explorando cómo el arte puede inspirar conciencia en nuestra sección BEartist.




