TIGRE DE TASMANIA, el último vídeo
Algunos científicos siguen intentando secuenciar sus genes
En la película The Hunter (El Cazador) Martin David -que encarna Willem Dafoe- es un mercenario enviado desde Europa a Australia por una compañía de biotecnología. Va a las selvas de Tasmania en busca algún ejemplar del extinto tilacino, el Tigre de Tasmania. Por desgracia es ficción, la especie desapareció en 1936.
Es necesario recordar el drama ecológico que hay detrás de la desaparición de una especie, para evitarla con todas nuestras fuerzas, en el futuro inmediato. Aquí te contamos más de este marsupial familiar de los canguros.
El último gran depredador marsupial
El tigre de Tasmania (Thylacinus cynocephalus) también se llamó lobo marsupial o tilacino, fue un marsupial carnívoro autóctono de Australia, Tasmania y Nueva Guinea. El depredador marsupial más grande que ha sobrevivido hasta el siglo XX. Desapareció principalmente por el acoso de los colonos europeos que desde el siglo XIX cuando decidieron matar a miles de ejemplares para proteger a sus ovejas.
En 1888 el Gobierno de Tasmania pagaba 1 libra por adulto muerto y 10 chelines por individuo joven
Menor que un lobo europeo
Este marsupial tenía un tamaño algo menor al de los lobos europeos, y pesaban entre 20 y 30 kilos. Y no sólo desapareció por la caza intensiva de los granjeros. También llegó a Australia y a Tasmania el dingo, un cánido de fuertes mandíbulas, que lo expulsó de grandes áreas.
Benjamín murió en el zoo de Hobart en 1936
El último tilacino conocido fue Benjamín, que murió en el zoológico de Hobart el 7 de septiembre de 1936. Qué angustia pensar que tras la muerte del animal que vemos ante nosotros ya no hay posible descencencia, por no tener una pareja disponible, al haber sido todos ya aniquilados.
Sabiendo que su testimonio sería el último, el naturalista David Fleay grabó unos minutos al último especimen, y esa película ha sido coloreada con los tonos reales del animal gracias a los que se conservan disecados. También lo grabó Sidney Cook un año antes de su muerte para un antiguo documental llamado Tasmania, el País de las Maravillas. Qué paradoja, filmó una maravilla perdida para poner diversidad al país que la aniquilaba.
Algunos científicos han intentado secuenciar los genes de la especie soñando con una clonación que hasta ahora ha sido inviable
Oficialmente desaparecido en 1986
Según el trailer de la película de Dafoe, Martin debe conseguir muestras biológicas de un Tigre de Tasmania, ya sea de sangre, pelo u órganos. Alojado en la cabaña de una familia, la hija de los dueños le comenta que vio un tigre de Tasmania el verano anterior.
Pero es ficción, no quedó ninguno.
Recompensas del Gobierno por matar tigres de Tasmania
Desde antes de 1830 se hizo oficial un sistema de recompensas por matar tilacinos. En 1888 el Gobierno de Tasmania pagaba 1 libra por adulto muerto y 10 chelines por individuo joven. Ese programa duró hasta 1909 y registró 2.180 recompensas.
Sin suerte para clonarlo
El tilacino o lobo marsupial -lo de tigre es sólo por las rayas en su piel- no tiene relación genética cercana con los perros ni lobos, sino con los canguros. Algunos científicos han intentado secuenciar los genes de la especie soñando con una clonación que hasta ahora ha sido inviable.
En Tasmania tomaron conciencia de la importancia de salvar a la especie demasiado tarde. La Ley lo protegió 59 días antes de morir el último ejemplar. La imagen principal de este artículo se conserva en el National Film and Sound Archive of Australia NFSA.
Edición BE OnLoop