VENTRUS, el restaurante que cambia de lugar con cada estación
Cada temporada en un enclave distinto con vistas excepcionales
Ventrus es un original restaurante efímero que empezó su viaje instalándose en el Parque de La Villette, en París. O ante el Palacio de los Papas de Avignon. Ofrece una increíble vista del skyline del lugar en que se instala, y una experiencia gastronómica muy especial. Ventrus está comprometido con la sostenibilidad, y todos los materiales utilizados en la construcción del restaurante son reciclables o biodegradables.
Guillaume Chupeau imaginó su restaurante Ventrus en 2012 sobre los acantilados de Normandía. El empresario imaginó una mesa efímera, no quería la inversión de un edificio permanente ni tampoco un simple food-truck. Y lo que fuese lo montaría frente a una vista excepcional, y con impacto mínimo en el entorno natural. Y tras crear un prototipo para Marsella terminó instalando su «restaurante nómada» en París.
Una nave de madera
La cabaña redondeada intriga a los paseantes en el prado donde se juntan los canales de Ourcq y Saint-Denis, en el Parque de la Villette. Lleva allí desde finales de octubre y permanecerá hasta marzo, pero tal vez hasta el verano.
Su forma evoca un estómago, o al menos eso quería el del diseñador Guillaume Chupeau con Ventrus avec vue -Ventrus con vistas-, y este restaurante móvil ofrece a sus clientes una experiencia efímera frente a paisajes singulares.
«Imaginé mi restaurante ideal. Un restaurante en el que se come bien, se bebe bien y en el que cada detalle forma parte de un enfoque local y de futuro», explica Chupeau.
Decoración forestal
El establecimiento es respetuoso con el medio ambiente y sostenible. Todos los elementos de la estructura están hechos con madera del Morvan. Una diseñadora de naturalezas muertas, Charlotte Mascart, ha decorado el interior con colgantes de plantas que recoge en el bosque de Rambouillet.
El consumo de agua ha disminuido un 80% gracias a la reutilización del agua del lavavajillas. Los ingredientes del menú son de proximidad y los residuos orgánicos son recogidos dos veces por semana por «Los Alquimistas», llegan en un triciclo ricksaw y lo transforman en compost en un pueblo cercano.
Los chef también son nómadas
Los jefes de cocina son tan provisionales como la instalación. Chupeau encuentra a sus chef de la misma manera que proyecta su siguiente lugar de instalación: viajando, y decidiendo que le encanta este lugar, organiza los proveedores y escoge a un chef de la zona.
Ahora, con el arquitecto François Muracciole están proyectando un segundo modelo que podría instalarse en el paseo marítimo de Trouville-sur-Mer, en Normandía. Y algunas grandes fincas del vino muestran interés por instalar un Ventrus en sus viñedos.
Edición BE OnLoop
